El secretario de Estado italiano criticó el pasado mes de abril, un anuncio publicado por la empresa Ikea, en el que usaban como objeto una pareja gay. Según este señor, " Es de muy mal gusto que una multinacional sueca venga a Italia a decirle a los italianos como deben pensar".
Desde una posición ética, lo dicho por Giovanardi no tiene ni pies , ni cabeza. El que en un anuncio pongan como objeto una pareja homosexual , no significa que les imponga a los italianos una manera de pensar diferente, porque ser homosexual no es ser diferente. Ya no es tener gustos distintos, porque si los mirásemos desde el punto homosexual, nosotros seriamos distintos; sino tener otros gustos. Pensar éticamente, también incluye tratar a todo ser de la misma manera, y en este caso no es así.
El comentario de Giovanardi, es homófogo y hace una gran discriminación hacia los homosexuales, con lo cual se viola el derecho a la libertad de expresión y de pensamiento.
Por otra parte, Giovanardi tiene derecho a la libre opinión y a comentar lo que el crea oportuno. Pero esto no significa que lo haya hecho éticamente.
Mª Victoria Arroyo Chacón 4ºA
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